Me presento: me llamo Lara, tengo 20 años, soy de Madrid, y si todo sale bien, en menos de un año me iré a estudiar a Salamanca. Me considero una persona inquieta y sencilla, con grandes sueños y metas aún más enormes, y desde hace unos años me perseguía la idea de irme a estudiar fuera de mi ciudad. Al empezar la universidad, parecía que ese sueño se había quedado guardado en un cajón, pero con el paso del tiempo vi que había muchas más posibilidades de las que pensaba y que la carrera no iba a ser el final de mi formación. Estudio música desde los 10 años, por lo que pensé que irme a Salamanca sería una gran oportunidad para ampliar mis estudios dentro de este campo. Y así es como finalmente me decidí por cumplir un sueño, lanzarme a la piscina y arriesgarme.
Mi idea inicial es pasar en Salamanca 4 años, sin mis padres, sin mis amigos, sin la comida de mamá y sin mi familia, lejos de todo lo que conozco, rodeada de desconocidos que espero pronto se vuelvan conocidos. En un principio me planteé la posibilidad de ir a una residencia de estudiantes, por las comodidades que ofrece y la seguridad que da a mis padres a pesar de tenerme lejos. Sin embargo, teniendo en cuenta que mi centro de estudios está lejos del centro, donde se concentran la gran mayoría de residencias, y que no son precisamente baratas, finalmente he optado por la segunda opción: piso compartido con otros estudiantes.
Y es aquí donde empieza la odisea, la búsqueda de un lugar decente donde pasar al menos 9 meses. A partir de ahora, dedicaré este blog a contar como empiezo esta aventura, los primeros pasos antes de marcharme, las despedidas, mis primeros días sola, la soledad inicial, las anécdotas que te pasan cuando eres novato en esto de vivir solo, los nervios al llegar a tu nueva habitación, la emoción que te llena cuando vas tú sola por primera vez al supermercado...
Si estas en mi misma situación, no te cortes, hay hueco para todos. Cualquier comentario, consejo o sugerencia será de gran ayuda.
Gracias por leerme y nos vemos en el siguiente post.
Mi idea inicial es pasar en Salamanca 4 años, sin mis padres, sin mis amigos, sin la comida de mamá y sin mi familia, lejos de todo lo que conozco, rodeada de desconocidos que espero pronto se vuelvan conocidos. En un principio me planteé la posibilidad de ir a una residencia de estudiantes, por las comodidades que ofrece y la seguridad que da a mis padres a pesar de tenerme lejos. Sin embargo, teniendo en cuenta que mi centro de estudios está lejos del centro, donde se concentran la gran mayoría de residencias, y que no son precisamente baratas, finalmente he optado por la segunda opción: piso compartido con otros estudiantes.
Y es aquí donde empieza la odisea, la búsqueda de un lugar decente donde pasar al menos 9 meses. A partir de ahora, dedicaré este blog a contar como empiezo esta aventura, los primeros pasos antes de marcharme, las despedidas, mis primeros días sola, la soledad inicial, las anécdotas que te pasan cuando eres novato en esto de vivir solo, los nervios al llegar a tu nueva habitación, la emoción que te llena cuando vas tú sola por primera vez al supermercado...
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